viernes, octubre 19, 2012

Lluvia

Hoy llueve sobre la ciudad. El cielo se confunde con el asfalto gris y los rostros desaparecen tras paraguas de colores. Duermes en un lugar oscuro, con tus mejores ropas, en una cama hecha de rosas. Con los rostros que tanto querías entre tus manos. Aun no ha llegado el frio, las tardes ya son oscuras y tu recuerdo me asalta en medio del ruido. La soledad reside dentro de mí, la siento moverse en mi corazón. Te hecho tanto de menos, tu voz duerme en mis oídos y el olor de tu piel recorre los rincones de casa. Salí corriendo de ese hospital y no he dejado de correr. No puedo detenerme, no puedo afrontar que ya no te veré nunca más. Ayer te quise llamar, por un segundo todo era como siempre y recordé que hacía mucho que no hablaba contigo, por un segundo olvidé que ya no estás aquí. El segundo más dulce des de que te dije lo mucho que te quería y tú me respondiste.
Cuanto hace que te fuiste, cuanto hace que no soy feliz. Tu sitio esta vacio cada sábado, miro la silla donde deberías estar y te veo mirarme y sonreír. Eres mi secreto mejor guardado, mi amor más profundo y mi pasado, mi presente y todo mi futuro.
Siempre seré tu prueba de vida...