martes, julio 02, 2013

Deshonor y condena

Amanece gris en julio, amanece con lluvia en las ventanas. Solo cabe esperar que aparezcas de nuevo con un cesto lleno de caramelos. Han podrido tu recuerdo, ensuciado mi memoria, traicionado mi honor. La vergüenza acuna mis noches de silencioso olvido. No tengo perdón que repartir a aquellos que me sentenciaron sin pruebas al destierro y a la ignorancia del delito. No tienen cabida en mi vida, son humo que se lleva el viento.
Pero tu, tú que ya no estás, y la duda, de si me creíste capaz, arrastraré por esta vida sin encontrar consuelo. Mi alma llena de lodo oscuro ya no encontrará sosiego en tus palabras, en tu voz, pues me han quitado todo lo que era tuyo por pleno derecho, bajo el estandarte de la justicia del hombre, tras una moral con doble rasero. Aquellos que se creen dignos serán olvidados junto a sus condenas.
Me queda solo un camino por andar y será andado caiga quien caiga, pq solo la verdad nos hará libres. No bajaré la cabeza, buscaré el origen, buscaré la luz, te buscaré siempre.

1 comentario:

Momo dijo...

No ofende quien quiere sino quien puede. i....ells no poden fer-ho